Para mi amigo personal, mentor, diseñador, principal redactor y "founder de este Web Site" wenselao; fue toda una sorpresa el alto nivel de participación que concitó el último estudio de opinión que el mismo realizó; sin embargo, lo bochornoso del incidente sobre el cual se inquirían las alternativas propuestas es algo tan común, que no debiera sorprendernos. ¿Quién no ha sido víctima o involuntario causante de tan magra situación? Muy pocos. Y la alternativa que arrasó, con una mayoría absoluta, es decir, más del 50%+1 de los sufragios tampoco debiera parecernos extraña. Aquí las razones del por que de esta situación

Hoy, los Chilenos hemos sufrido cambios sociológicos y psicológicos importantes. Ya no somos los caballeros que nos creímos durante mucho tiempo cuando nos autoimpusimos el "mote" de los "ingleses de Sudamérica", buscando emular con nuestras actitudes a los tan famosos Lords de aquella Anglosajona Monarquía. Hoy somos en mayor o menor medida clones de una nueva raza de trepadores, dispuestos a cualquier cosa con tal de no dañar nuestra imagen, aún a costa de quien está al lado nuestro. El pisoteo, el ninguneo, y la vulgar mariconada, se han transformado en parte de nuestra vida cotidiana. "Se me salió un chancho podrido, ¿que hago?", ¿me hago el weon?, ¿me disculpó?, ¿me pongo rojo? (como lo habría hecho cualquier chileno de la Segunda mitad del Siglo pasado?; NO, mejor le hecho la culpa al "Culiao" del lado, pero que tampoco sea tan evidente... entonces... solo lo miro feo, así me desligo, pero tampoco quedo tan mal con él, ya que no lo acusé abiertamente.


Detrás de esta cotidiana situación se esconden muchas nuevas actitudes de nuestra sociedad; pero no tan solo eso, ya que no culpamos al "weon" del lado, culpamos al "culiao" del lado; y aquí otro gran cambio. La RAE aceptó el término weon, o sea ahora los weones en Chile tienen raíz etimológica, lo que hace que ya no sea una ofensa decirle weon a alguien y estamos transmutando en el vulgo lenguaje ese término tan chileno por el vulgar, feo y sodómico "culiao", que imputa la grave acusación de haber sido victima de una practica sexual condenada por las leyes humanas y divinas.

Es por eso amigos que me permito conminarles a reflexionar sobre el tema y a intentar eliminar de nuestro vocabulario tan soez término, impidiendo así que el culiao termine desterrando solo a las hojas de un diccionario al weon.

No me gustaría ver a un Boris Quercia filmando en algunos años más la dolorosa película "El Rey de los Culiaos".

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